En el barrio de san Andrés, viven Joaquín y sus amigos. Muy malandrines, pero Joaquín es muy diferente a ellos. Pero a él le gustaba estar en patota. La muchas palomilladas que hacían, en casi muchas de ellas, nunca participo, pero siempre caía. Su madre siempre iba y lo sacaba de apuros, y le metía una feroz grito. Pero siempre se salia con las suyas. Sus padre es medico, y deseaba que él siga esa carrera, y muchas veces, le sugirió a Soledad su esposa irse a vivir a otros lado. Ella sabia que su hijo amaba a su barrio y sus amigos. Ella era enfermera pero no ejercía, solo se dedico a cuidar de su hijo desde que nació. Pero Joaquín al oír esa petición, le pedía, a sus padres, que no. El era muy feliz, estando allí con sus grandes amigos, esos palomillas, algunos ya rankeados y fichados por la policía. A pesar de ser diferente, él se sintió igual a ellos. Algunas veces les pidió no hacer algunas de sus fechorias, pero no le hacían caso, incluso le pidieron que se vaya de allí, y terminaba siempre ayudandolos. Nunca le falto de nada, los juguetes que siempre recibió, los compartia con ellos. Casi pocos lo miraban como niño mimado, pero no lo era. Desde niño aprendió a ser bueno.
Al lado de ese sito faite, hasta hace unos pocos años, en un gran descampado, estaban construyendo una nueva urbanizacion. Debido al éxito que había con las nuevas familias ricas. Con apenas 13 años, iba con ellos, por las noches, y se robaban cosas, materiales y herramientas. Para luego venderlas. Pero se moría de miedo, y lo ponían de campana. Muchas veces se incomodaba. Hasta pensó en dejarlos allí. Pero no podía traicionarlos. Y siempre cuando repartían el dinero de la ganancia. Él lo rechazaba, pero le insistían. Y se lo gastaba los fines de semana, en los partidos del barrio, en las apuestas, o invitando refrescos o helados, al lo que se lo pidiese. No tenia problemas económicos, su padre ganaba bien, y trabaja en el hospital del empleado. Cuando se metía en embrollos, su madre lo sacaba de apuros, pero nunca le decía nada a su padre. Pero siempre se enteraba por los chismes del barrio. Un día le metió un jalón de orejas, delante de sus amigos. Quienes no podían decirle nada. Este les echaba una reprimenda y los mandada a estudiar.
El Cholo Jesús, Chucho y Oscar, eran tres de los mejores amigos de Joaquín. Le llevaban unos cuantos años de diferencia. Siempre, salían en mancha de 9 a 15, pero siempre, eran esos 4 quienes estaban más unidos. Oscar siempre vacilaba a Joaquín, por que su madre, nunca los dejaba ir, pero el Cholo Jesús, lo defienda. Joaquín sabia, que en el fondo eran buena gente, a pesar de ser de familias separadas, o recontra malandros. Los vecinos, se respetaban entre si, nunca chocarían, con uno de ellos, y si se metian con uno de los suyos, ellos saltarían. El Cholo vivia a tres viviendas. Tenia 15 años, y siempre iba a la casa de tres plantas de Joaquín. Como sabia que su madre, la señora Soledad, no le dejaría salir, silbaba con un estilo que ellos solo sabían, él salia como un rayo, mostrándole a su madre los deberes hechos. Siempre le decía que volviese temprano, o tal hora Joaquín, siempre obedecía. Siempre fue así al pasar los años.
En una esquina, de aquel barrio, había un billar, propiedad de un tío de Oscar, y este se recurseaba allí, pero su tío lo explotaba. Hasta que un día intento vengarse. Imagino una idea. Se lo planifico y comento a sus amigos. Ya tenían los 18 , salvo Joaquín, quien recién había cumplido los 15. Los tres, y unos cuantos más, asaltaron el billar de su tío. Se llevaron todo, incluso cajas de cervezas. Cuando Joaquín, tenia 6 años, sus tíos le regalaron por navidad unas pistolas de juguete, que parecían de verdad. Esas pistolas, les sirvió a esos muchachos, para llevarse el dinero del billar. Alquilaron un auto muy viejo. en una cochera lejana de otro distrito. Fue la primera vez que Joaquín no participo. Ellos sabían que si le contaban, se iba a cagar de miedo. Nunca los delataría, pero si tal vez se hubiera ido al tacho, por el temor que siempre tenia.
Cuando Joaquín estaba en 5 de secundaria, su padre decidió y obligo que se vaya preparando ,en una academia pre universitaria así, que por las tardes estudiaba en su colegio. Y por las noches, se iba al centro de Lima. Ya no tenia tiempo, para sus patas. Pero seguían siendo amigos. Los fines de semana en los partidos de fulbito, en la lozita del barrio, en un rincón le contaban sus fechorias. Él solo se vacilaba y reía con ellos. Pidiéndoles mesura, ya que temía que les pasara algo, o cayesen en cana. El Cholo era su mejor amigo. Este ya tenia su jermita. Y muchas veces lo invitaba a salir, a tonear pero Soledad nunca dejaba salir a su hijo, los sábados por las noches con ellos. Siempre se metían en pleitos. Con las cabezas rotas, y ensangrentados llegaban a su barrio.
-Habla, broter, ¿que tal el estudio?
-Cansado, cholito, muy cansado.
-Si, pues desde que estas todo el día en eso. ya casi ni te veo.
-Mis viejos me obligan, caballero, pues.
-Oye y tienes ya jermita.
-Nada cholito.
-Pero alguna de la pre, pe' huevon.
-Todas son muy sobradas, pero guapas todas.
-Tu mismo eres, pe' primo.
-Si, pero si hago, me descuido los estudios y la cago.
-Te voy a presentar a Marilin, una flaca que siempre baja con nosotros al tono.
-Sale, ¿pero como es?
-Tranqui Joaquín, el sábado pe', tu dices, yo le digo, por que esta solita,y ta'piola.
-Sábado, ojala y mi vieja me deje salir, tu sabes como se pone.
-Tu vieja es bien jodida.
-Si, pues.
-¿Entonces que sale, o no?
-Yo te aviso, cholito.
-Sale, brother.
Al terminar la construccion de aquella urbanizacion, empezó a llegar a vivir gente. Muchas familias, muchas caras nuevas. Ya se veía un poco de movimiento, pero no del todo, del montón de esas lujosas casas. Apenas unas cuantas, albergaban esas nuevas familias adineradas. Es de un todo terreno moderno, donde baja Estela y sus padres.
Estela, una chica rubia de 18 años, su 1.75 la hace una mujer muy esbelta y guapa. Llegaron a vivir allí, debido a la explosión demográfica, que sufre Lima. Estudiante de la Universidad de Lima. lleva un perro de mascota. Un cowboy de camiones, empiezan la mudanza. Mientras ella mira aquella enorme casa que sus padres habían mandado a construir. Es una zona muy residencial, muy bella, un poco cercana al barrio de Joaquín y su amigos. Ya instalados, no buscan amistades, cambiaron de zona, pero no de sociedad, siguen frecuentando a sus antiguos amigos. Los autos modernos de aquella familia. Siempre estaban allí. Para llevarlos a todas parte que ellos deseaban.
Joaquín, quien pasa por allí cerca caminando, hacia su lugar de estudios. No se ha alejado del todo de sus amigos, mas si de sus fechorias. Ellos no quieren ensuciar a su amigo, por eso solo prefieren dejarlo de lado en esas cosas, y que siga estudiando. Un día miraba como entraba allí, esa linda rubia. Jamas había visto una chica tan linda. De porte atlético. Joaquín como todo chico normal miraba y miraba a esa linda niña. Ella, nunca se fijaba en nadie. Nunca lo hacia. Todas las mañanas, Joaquín apuraba el camino, para poder verla salir. Ella se marchaba a estudiar, y no llegaba hasta muy tarde. Joaquín paso así mucho tiempo. Hasta que él pensó, ¿como haré, para que se fije en mi? ¿qué?. Pero no sabia. Si ella salia, desde el auto que la esperaba afuera. Estela, se subía, y ya no volvía. Joaquín, empezó a ilusionarse.
Estela, es una buena estudiante, llegaron a ese sitio, debido a que, fue solo eso, lo que su padre pudo comprar. Ella se imaginaba ir a vivir, a esas lujosas mansiones que veía en aquellas revistas que le llegaban a su madre. Tenían una casa de playa, en el sur, pero tuvieron que venderla. Ella, quien apenas solo conoce el frontis de su casa, sale rauda a estudiar, pero muchos piensan que no, pero ella siempre se fija en todo, observa a la gente pasar. Se ha dado cuenta que Joaquín, siempre esta allí solo para verla. Eso imagina, y tiene razón. En la universidad tiene un novio ricachón, pero muy presumido. Solo están por diversión. No sabe si esta enamorada.
Al pasar los meses, Joaquín no lograba sacarse de la cabeza a esa linda larguirucha. ¿Como aliviar aquello?, si ella, ni siquiera asoma la cabeza, para ver a su alrededor. Pero en una tarde de clases. Miraba como ella entraba a su centro de estudios. No podía creerlo ¿que hacía? ella allí. Mientras sus ojos la seguían fielmente, ella se acerco y se fue a la dirección. El rector, era su tío, ella fue a visitarlo Al pasar media hora en aquella dirección. Joaquín, quien no le importo perder clase en esa hora, espero fielmente. Hasta que salio y se despidió de aquel tío suyo.
Los meses crueles que le ha tocado vivir a Joaquín. Hoy se ha encontrado con su gran amigo el Cholo Jesús, quien se ha vuelto, mas avezado. Junto a él, los mismo de siempre Chucho y Oscar, quien ya tienen familia, pero siguen siendo los mismos vagos de siempre Ellos a veces, hacen sus pendejadas muy lejos de su barrio que Ha cambiado mucho. Los sábados de fulbito son sagrados para Joaquin y hablo con el Cholo, quien no veía desde hace mucho.
-¿Que fue de tu vida, cholo?.
-Ahí pues, Joaquín como siempre, hecho un trompo
-¿Como un tompo?
-Dando vueltas, pe'huevon
-jajaja, que pendejo.
-¿y que tal las clases?
-Bien, como siempre, sabes que si no estudio, mi vieja me da con palo
-jaja, tu vieja como siempre ¿y que haces hoy por la noche?
-Ahí, tengo un trabajo que hacer, pero no puedo, estoy con la cabeza en otro lado
-¿Qué pasa?, algún profesor que te jode, avisa nomas, lo ajustamos
-No, no es eso
-¿Entonces que?, seguro, ya se, una flaquita
-Si, huevon, me gusta una chica, pero ella ni enterada
-Tu mismo eres, pe' primo. tu como siempre, eres bien chupao' te falta labia.
-Si, pues. csm, no se que hacer.
-Oye hoy salimos, tu no dices que no puedes estudiar, vamos pe' para que te relajes
-Puede ser, ya mañana lo termino, no creo que mi vieja me diga algo.
Joaquín, es una persona normal como cualquiera, ama a sus padres, ama a su barrio, estima a sus amigos, a quienes quiere como sus hermanos, aunque estén en malos, paso. Cuando alguien se metia con él, era el Cholo, quien saltaba por él, al Cholo lo respetan desde chibolo, ahora con 21 años, más aún. En el fondo el Cholo, también quiere como a un hermano a Joaquin, ambos son hijos únicos, no como Oscar y Chucho, que son de familia numerosa. Hacen sus travesuras y fechorias. Pero siempre libran. son muy suertudos. Hace poco robaron un auto de lujo, lo desmantelaron y sacaron una buena ganancia. Chucho es el mecánico, y el chofer. Pero en una trifulca con una pandilla rival, le rompieron la rodilla, y desde alli dejo de conducir, puede caminar, pero si hay que correr, pierde. Por eso cranea un plan que no signifique salir corriendo. Se lo comenta a Oscar y al Cholo, a quienes la idea les parece gustarle.
El Cholo, ya no llama para sus fechorias a Joaquín desde hace mucho, solo cuando se encuentran, hablan su amistad verdadera.
Ha llegado el día de aquel plan que ideo Chucho. Es sábado. Están confiados en que todo salga bien. Con pasa montañas y mascaras especiales para el trabajito aquel. Chucho, habia estudiado, bien la situación. Busco un auto nuevo. Están al acecho. Pero se percatan de algo, que no esperaban. Todo bien hasta que por ahí pasa Joaquín.
-¡Mierda Joaquín! (grita, chucho)
Joaquín, quien lo reconoce, va a su alcance...
-¡Sube rápido huevon!
-¿Que pasa, loco? (estaban los tres allí)
-Ponte esto en la cabeza, rápido y no digas nada. (los cuatro se pusieron el pasamanontañas)
-¿Que pasa cholo?-le pregunta Joaquín al Cholo Jesús
-Estamos chambeando y justo apareces, huevon.
-¿Que hice?
-Nada, nada...y cuando te diga ya, avanzas, (chucho dirigiéndose a Oscar quien conducía)
Joaquín, a veces bajaba, por que sabia que a esa hora saldría a pasear Estela, esa rubia de 1.75. por la cual, él había perdido un poco la cabeza. La larguirucha, como la llamaba él, siempre salia los sábados, nunca salia con su chofer. Y este siempre salia a verla, le encantaba como vestía para irse a divertir. Chucho, también conocía a aquella larguirucha, y sabia que eran de dinero, estudio todo, lo planifico bien, salvo, ese pequeño detalle. Que Joaquín, pasara por allí, solo para contemplarla.
Iban a secuestrar la, para pedir, una gran cantidad de dinero. Raudo Oscar, intercepto el coche de Estela, y bajaron los tres y la metieron al auto. Joaquín no daba crédito a lo que veía, no hablaba nada, temblaba. Ya la cagamos pensaba en si, Mientras que ella, sin poder safar de ellos. no podía gritar, Chucho la amenazo con una navaja, muy filuda, para que no gritase, indico a Joaquín, a taparle la boca, con una cinta. Joaquín, tembloroso hizo caso. Los ojos llorosos de Estela, miraban como con las manos temblorosas, no podía pegarle esa cinta.
El Cholo sabia, que podía embarrar a su gran amigo. Le pidió a Oscar parar. Y dirigiéndose a Joaquín, le pidio bajar. Él no acepto. No quería irse. Lo obligo, pero todo tembloroso, siguió negandose. mientras Chucho, le pidió a Oscar seguir.
-Dejalo, ya huevon., no ves que no quiere bajar, la vas a cagar
-¡No jodas huevon!, él no puede mancharse, bajate huevon (dirijiendose otra vez a Joaquín)
-¡Ya cállate!, llegando hablamos, tápale la cara a la flaca.
El Cholo un poco acalorado, le puso una bolsa de tela, en la cabeza. Se fueron en silencio, hasta el lugar del destino. La metieron a una vieja casona abandonada. No había casas cercanas, era muy alejado de Lima. Bajaron los tres y se llevaron a estela, Mientras, Joaquín, se quedo inmóvil. chucho le ordeno bajar. No tuvo más opción de hacerlo. Ya adentro a acordaron llamar para pedir el dinero. Oscar con una grabadora, hizo que ella hablara con sus padres, y que les mande el dinero. Con un celular nuevo, Oscar y Chucho, marcharon de alli a unos diez kilómetros, por temor a que lo rastreen. Quedaron los tres, Joaquín, miraba con asombro a Estela. El cholo tenia miedo embarrar a su amigo
-¿Por que carajo, no te bajaste, cuando te lo pedí.
-No le hagan daño, por favor.
-Yo que chucha se, es cuestión de ese huevon del cojo(chucho)
-Si, pero no le hagan nada, por favor .
-¿Que mierda te pasa?, ¿la conoces?.
-........
-Habla pe' huevon, responde.
-Si, ella es la chica que te conte, Cholo.
-¡Puta madre no jodas! no la cages pe'.
A Joaquín le aterraba la idea de que abusaran de ella, o quizás matarla. El Cholo le prometió que eso no iba a pasar. Solo le pidio que se vaya. Pero él seguía negándose. Al volver, Chucho y Oscar, tenian un poco de desconfianza. Ya que los padres no querían soltar esa cantidad de dinero que ellos le habían pedido. 2 millones de nuevos soles. Así que decidió, arriesgar, e hizo que ella los llamase, le quitaron otra vez la bolsa de tela, y la cinta de la boca. Allí Chucho le marco y ella toda aterrada y solloza, le pidió a sus padres rescatarla. Chucho se había vuelto muy avezado. y los amenazo con matarla. Esto puso en sobre salto a Joaquín quien aterrado al oir eso, salio a la calle. Detrás de él, salio el Cholo
-No te preocupes, huevon, solo lo dice para que le paguen rapido, ya te dije que no haríamos, eso
-Gracias cholo, eres muy bueno
-¡Ya entra, huevon!
Estela sabia muy bien que sus padres pasaban apuros económicos, como harían. Pensó en lo peor.
Al día siguiente, Aquel acto, ya era una noticia. Pero no sabían como dar con ellos. Soledad, no sabia donde andaba su hijo, pensó que estaría en casa de algún compañero. Y no se preocupo más. Era como las tres de la tarde, y la policía estaba con la familia de Estela, dieron con su auto moderno casi cerca de allí. Pero no tenían mas pistas. Chucho y Oscar, se fueron por comida y agua, esperando que la llamada de los padres de
Estela. Ya ahí, es donde el Cholo se queda dormido. Joaquín con unas ojeras. no había dormido nada. Le saco la bolsa de tela a su largirucha, como él la llama. Le quito la cinta, él se quito aquel pasamontañas. y mirándola fijamente
-No te preocupes, todo va a salir bien, yo soy Joaquín.
-Si, te conozco, te veo siempre por las mañanas- le dice ella toda temblorosa.
-Si, salgo a eso, por que me gusta verte, eres la chica más hermosa que he visto.
-¿Y por que me hacen esto?
-Te juro, que no lo sabia, ellos son buenos, pero se equivocaron, pero todo va a salir bien, no te preocupés, yo te cuidare.
-Me cuesta mucho creerte.
-Créeme, vas a estar con tu familia, te lo prometo, perdoname, perdona a mis amigos.
-Sabes, escuche cuando hablabas con ese que llamas Cholo, es verdad todo eso.
-Si, desde que te vi, me quede maravillado por tu belleza, salgo a verte siempre, antes de irme a estudiar, ya con verte soy feliz.
-Si, me había dado cuenta, pero no tienes miedo que ellos te hagan algo.
-No, ellos son buenos. Por eso no te preocupes, lo malo es que estamos lejos, y no se como se llama este lugar, con la ira que tenia no me fije por donde veníamos.
-Ahora te creo, eres muy bueno.
-Por eso te repito, no te van a hacer daño. ten confianza en mi.
Al llegar ellos, Joaquín volvió a poner la cinta a estela, pero ahora con cuidado, pero no la bolsa. se puso el pasamontaña. Chucho no le dijo nada. No habían recibido llamada alguna, cosa que los irritaba. El cholo repartio la comida, y Joaquín le pregunto si no había para estela. Chucho en tono sarcástico, le respondió que la comida aquella, era para pobres y ella era muy rica. Insistió tanto, que el Cholo le llevo comida, pero ella lo rechazo, en seguida fue Oscar, pero también le rechazo. Al final fue Joaquín quien le desato la manos, y le quito la cinta de la boca. Ella comió, poco. Joaquín al ver eso, le agradeció. Ya no le puso la cinta. Él que acariciaba sus manos, mientras la ataba suavemente, no aguanto y beso su mano derecha, agradeciéndole el gesto de haber aceptado comer. Ella lo miro tiernamente, confiaba en sus palabras.
Alli, fuera del salón, Chucho, preguntaba que tanto hacia dentro, pero Joaquin, no respondia.
-No te vayas a pasar, huevon, si te comes ese bombon, nos lo comemos los cuatro.
-No hables huevadas pe', chucho - respondio el cholo.
--Ta'mare que bien que quieres.
-Nada, huevon, una cosa es una cosa, sabes como son las cosas.
-Si lo se, pero si hay que aprovecha se aprovecha.
-¡Ya callate huevon!
Mientras descansaban, llamaron al celular de Chucho, eran los padres de Estela, querían comprobar que no lo habían hecho daño. Le prometió enviarle un vídeo, pero con la condición que suelte de una vez el dinero. Ninguno de ellos quería grabarla. Joaquin cogió el celular, al ver que Estela no quería hablar, se saco el pasamontañas. Eso lo hizo para que tenga confianza
-¿Que haces huevon?, te van a reconocer- grito Oscar
-¿Que mierda pasa?- grito Chucho entrando a aquella habitacion
-¡Ese huevon, se ha quitado el pasamontañas!
-¿Que te pasa huevon?, nos quieres cagar- increpo a Joaquin.
-¡Amarralo a ese huevon!-ordeno chucho a oscar, y llamo al cholo quien estaba meando en la calle.
El Cholo desobedeció a Chucho, en ese instante empiezan a discutir. Joaquin le pidió mesura, le pidió a Estela que hablara con sus padres mientras la grababa. Al acabar entrego el celular a Oscar, quien no sabia como enviar eso, y llamo a Chucho, para que se encargase. El Cholo y Joaquín, a un lado conversaban. Eran ya las 12 de la noche y Soledad empezó a preocuparse por su hijo, llamo todos los que conocía. Incluso fue a la casa del Cholo, pero cuando le dijeron que no estaba. Ya se imaginaba que estaba con ellos. Le daba miedo ir a la policía, tal vez le paso algo. A lo mejor se enteraria de algo terrible. Llego a casa y le puso una vela a San Martín de Porres.
Al ver el vídeo, una y otra vez. Joaquín pensó que tal vez los reconozcan por la voces, y se los dijo. Ellos le dieron la razón, era mejor borrarlo y hacer otro. Chucho ya no confiaba en el Cholo. Era muy amigo de Joaquín, así que se lo llevo a comprar y dejo a Oscar con ellos. Pero Oscar estaba muy cansado, y se quedo muy dormido a pesar de la advertencia de Chucho.
Para esas horas la policía, gracias a la dos llamadas que hizo desde aquella casa vieja, logro ubicarla. Y decidió ir en su búsqueda. La familia no queria soltar dinero alguno. Cuando Joaquín vio que Oscar se habia quedado profundámente dormido. Entro y empezó a conversar con Estela, ella le agradeció todo lo que hacia
-Sabes, no aguanto más aquí, te propongo escapar de aqui, no se realmente, pero te prometo que estarás en casa muy pronto, ¿que dices?
-Si, salgamos de aquí, ya no aguanto (casi llorosa lo abrazo)
Al lado de ese sito faite, hasta hace unos pocos años, en un gran descampado, estaban construyendo una nueva urbanizacion. Debido al éxito que había con las nuevas familias ricas. Con apenas 13 años, iba con ellos, por las noches, y se robaban cosas, materiales y herramientas. Para luego venderlas. Pero se moría de miedo, y lo ponían de campana. Muchas veces se incomodaba. Hasta pensó en dejarlos allí. Pero no podía traicionarlos. Y siempre cuando repartían el dinero de la ganancia. Él lo rechazaba, pero le insistían. Y se lo gastaba los fines de semana, en los partidos del barrio, en las apuestas, o invitando refrescos o helados, al lo que se lo pidiese. No tenia problemas económicos, su padre ganaba bien, y trabaja en el hospital del empleado. Cuando se metía en embrollos, su madre lo sacaba de apuros, pero nunca le decía nada a su padre. Pero siempre se enteraba por los chismes del barrio. Un día le metió un jalón de orejas, delante de sus amigos. Quienes no podían decirle nada. Este les echaba una reprimenda y los mandada a estudiar.
El Cholo Jesús, Chucho y Oscar, eran tres de los mejores amigos de Joaquín. Le llevaban unos cuantos años de diferencia. Siempre, salían en mancha de 9 a 15, pero siempre, eran esos 4 quienes estaban más unidos. Oscar siempre vacilaba a Joaquín, por que su madre, nunca los dejaba ir, pero el Cholo Jesús, lo defienda. Joaquín sabia, que en el fondo eran buena gente, a pesar de ser de familias separadas, o recontra malandros. Los vecinos, se respetaban entre si, nunca chocarían, con uno de ellos, y si se metian con uno de los suyos, ellos saltarían. El Cholo vivia a tres viviendas. Tenia 15 años, y siempre iba a la casa de tres plantas de Joaquín. Como sabia que su madre, la señora Soledad, no le dejaría salir, silbaba con un estilo que ellos solo sabían, él salia como un rayo, mostrándole a su madre los deberes hechos. Siempre le decía que volviese temprano, o tal hora Joaquín, siempre obedecía. Siempre fue así al pasar los años.
En una esquina, de aquel barrio, había un billar, propiedad de un tío de Oscar, y este se recurseaba allí, pero su tío lo explotaba. Hasta que un día intento vengarse. Imagino una idea. Se lo planifico y comento a sus amigos. Ya tenían los 18 , salvo Joaquín, quien recién había cumplido los 15. Los tres, y unos cuantos más, asaltaron el billar de su tío. Se llevaron todo, incluso cajas de cervezas. Cuando Joaquín, tenia 6 años, sus tíos le regalaron por navidad unas pistolas de juguete, que parecían de verdad. Esas pistolas, les sirvió a esos muchachos, para llevarse el dinero del billar. Alquilaron un auto muy viejo. en una cochera lejana de otro distrito. Fue la primera vez que Joaquín no participo. Ellos sabían que si le contaban, se iba a cagar de miedo. Nunca los delataría, pero si tal vez se hubiera ido al tacho, por el temor que siempre tenia.
Cuando Joaquín estaba en 5 de secundaria, su padre decidió y obligo que se vaya preparando ,en una academia pre universitaria así, que por las tardes estudiaba en su colegio. Y por las noches, se iba al centro de Lima. Ya no tenia tiempo, para sus patas. Pero seguían siendo amigos. Los fines de semana en los partidos de fulbito, en la lozita del barrio, en un rincón le contaban sus fechorias. Él solo se vacilaba y reía con ellos. Pidiéndoles mesura, ya que temía que les pasara algo, o cayesen en cana. El Cholo era su mejor amigo. Este ya tenia su jermita. Y muchas veces lo invitaba a salir, a tonear pero Soledad nunca dejaba salir a su hijo, los sábados por las noches con ellos. Siempre se metían en pleitos. Con las cabezas rotas, y ensangrentados llegaban a su barrio.
-Habla, broter, ¿que tal el estudio?
-Cansado, cholito, muy cansado.
-Si, pues desde que estas todo el día en eso. ya casi ni te veo.
-Mis viejos me obligan, caballero, pues.
-Oye y tienes ya jermita.
-Nada cholito.
-Pero alguna de la pre, pe' huevon.
-Todas son muy sobradas, pero guapas todas.
-Tu mismo eres, pe' primo.
-Si, pero si hago, me descuido los estudios y la cago.
-Te voy a presentar a Marilin, una flaca que siempre baja con nosotros al tono.
-Sale, ¿pero como es?
-Tranqui Joaquín, el sábado pe', tu dices, yo le digo, por que esta solita,y ta'piola.
-Sábado, ojala y mi vieja me deje salir, tu sabes como se pone.
-Tu vieja es bien jodida.
-Si, pues.
-¿Entonces que sale, o no?
-Yo te aviso, cholito.
-Sale, brother.
Al terminar la construccion de aquella urbanizacion, empezó a llegar a vivir gente. Muchas familias, muchas caras nuevas. Ya se veía un poco de movimiento, pero no del todo, del montón de esas lujosas casas. Apenas unas cuantas, albergaban esas nuevas familias adineradas. Es de un todo terreno moderno, donde baja Estela y sus padres.
Estela, una chica rubia de 18 años, su 1.75 la hace una mujer muy esbelta y guapa. Llegaron a vivir allí, debido a la explosión demográfica, que sufre Lima. Estudiante de la Universidad de Lima. lleva un perro de mascota. Un cowboy de camiones, empiezan la mudanza. Mientras ella mira aquella enorme casa que sus padres habían mandado a construir. Es una zona muy residencial, muy bella, un poco cercana al barrio de Joaquín y su amigos. Ya instalados, no buscan amistades, cambiaron de zona, pero no de sociedad, siguen frecuentando a sus antiguos amigos. Los autos modernos de aquella familia. Siempre estaban allí. Para llevarlos a todas parte que ellos deseaban.
Joaquín, quien pasa por allí cerca caminando, hacia su lugar de estudios. No se ha alejado del todo de sus amigos, mas si de sus fechorias. Ellos no quieren ensuciar a su amigo, por eso solo prefieren dejarlo de lado en esas cosas, y que siga estudiando. Un día miraba como entraba allí, esa linda rubia. Jamas había visto una chica tan linda. De porte atlético. Joaquín como todo chico normal miraba y miraba a esa linda niña. Ella, nunca se fijaba en nadie. Nunca lo hacia. Todas las mañanas, Joaquín apuraba el camino, para poder verla salir. Ella se marchaba a estudiar, y no llegaba hasta muy tarde. Joaquín paso así mucho tiempo. Hasta que él pensó, ¿como haré, para que se fije en mi? ¿qué?. Pero no sabia. Si ella salia, desde el auto que la esperaba afuera. Estela, se subía, y ya no volvía. Joaquín, empezó a ilusionarse.
Estela, es una buena estudiante, llegaron a ese sitio, debido a que, fue solo eso, lo que su padre pudo comprar. Ella se imaginaba ir a vivir, a esas lujosas mansiones que veía en aquellas revistas que le llegaban a su madre. Tenían una casa de playa, en el sur, pero tuvieron que venderla. Ella, quien apenas solo conoce el frontis de su casa, sale rauda a estudiar, pero muchos piensan que no, pero ella siempre se fija en todo, observa a la gente pasar. Se ha dado cuenta que Joaquín, siempre esta allí solo para verla. Eso imagina, y tiene razón. En la universidad tiene un novio ricachón, pero muy presumido. Solo están por diversión. No sabe si esta enamorada.
Al pasar los meses, Joaquín no lograba sacarse de la cabeza a esa linda larguirucha. ¿Como aliviar aquello?, si ella, ni siquiera asoma la cabeza, para ver a su alrededor. Pero en una tarde de clases. Miraba como ella entraba a su centro de estudios. No podía creerlo ¿que hacía? ella allí. Mientras sus ojos la seguían fielmente, ella se acerco y se fue a la dirección. El rector, era su tío, ella fue a visitarlo Al pasar media hora en aquella dirección. Joaquín, quien no le importo perder clase en esa hora, espero fielmente. Hasta que salio y se despidió de aquel tío suyo.
Los meses crueles que le ha tocado vivir a Joaquín. Hoy se ha encontrado con su gran amigo el Cholo Jesús, quien se ha vuelto, mas avezado. Junto a él, los mismo de siempre Chucho y Oscar, quien ya tienen familia, pero siguen siendo los mismos vagos de siempre Ellos a veces, hacen sus pendejadas muy lejos de su barrio que Ha cambiado mucho. Los sábados de fulbito son sagrados para Joaquin y hablo con el Cholo, quien no veía desde hace mucho.
-¿Que fue de tu vida, cholo?.
-Ahí pues, Joaquín como siempre, hecho un trompo
-¿Como un tompo?
-Dando vueltas, pe'huevon
-jajaja, que pendejo.
-¿y que tal las clases?
-Bien, como siempre, sabes que si no estudio, mi vieja me da con palo
-jaja, tu vieja como siempre ¿y que haces hoy por la noche?
-Ahí, tengo un trabajo que hacer, pero no puedo, estoy con la cabeza en otro lado
-¿Qué pasa?, algún profesor que te jode, avisa nomas, lo ajustamos
-No, no es eso
-¿Entonces que?, seguro, ya se, una flaquita
-Si, huevon, me gusta una chica, pero ella ni enterada
-Tu mismo eres, pe' primo. tu como siempre, eres bien chupao' te falta labia.
-Si, pues. csm, no se que hacer.
-Oye hoy salimos, tu no dices que no puedes estudiar, vamos pe' para que te relajes
-Puede ser, ya mañana lo termino, no creo que mi vieja me diga algo.
Joaquín, es una persona normal como cualquiera, ama a sus padres, ama a su barrio, estima a sus amigos, a quienes quiere como sus hermanos, aunque estén en malos, paso. Cuando alguien se metia con él, era el Cholo, quien saltaba por él, al Cholo lo respetan desde chibolo, ahora con 21 años, más aún. En el fondo el Cholo, también quiere como a un hermano a Joaquin, ambos son hijos únicos, no como Oscar y Chucho, que son de familia numerosa. Hacen sus travesuras y fechorias. Pero siempre libran. son muy suertudos. Hace poco robaron un auto de lujo, lo desmantelaron y sacaron una buena ganancia. Chucho es el mecánico, y el chofer. Pero en una trifulca con una pandilla rival, le rompieron la rodilla, y desde alli dejo de conducir, puede caminar, pero si hay que correr, pierde. Por eso cranea un plan que no signifique salir corriendo. Se lo comenta a Oscar y al Cholo, a quienes la idea les parece gustarle.
El Cholo, ya no llama para sus fechorias a Joaquín desde hace mucho, solo cuando se encuentran, hablan su amistad verdadera.
Ha llegado el día de aquel plan que ideo Chucho. Es sábado. Están confiados en que todo salga bien. Con pasa montañas y mascaras especiales para el trabajito aquel. Chucho, habia estudiado, bien la situación. Busco un auto nuevo. Están al acecho. Pero se percatan de algo, que no esperaban. Todo bien hasta que por ahí pasa Joaquín.
-¡Mierda Joaquín! (grita, chucho)
Joaquín, quien lo reconoce, va a su alcance...
-¡Sube rápido huevon!
-¿Que pasa, loco? (estaban los tres allí)
-Ponte esto en la cabeza, rápido y no digas nada. (los cuatro se pusieron el pasamanontañas)
-¿Que pasa cholo?-le pregunta Joaquín al Cholo Jesús
-Estamos chambeando y justo apareces, huevon.
-¿Que hice?
-Nada, nada...y cuando te diga ya, avanzas, (chucho dirigiéndose a Oscar quien conducía)
Joaquín, a veces bajaba, por que sabia que a esa hora saldría a pasear Estela, esa rubia de 1.75. por la cual, él había perdido un poco la cabeza. La larguirucha, como la llamaba él, siempre salia los sábados, nunca salia con su chofer. Y este siempre salia a verla, le encantaba como vestía para irse a divertir. Chucho, también conocía a aquella larguirucha, y sabia que eran de dinero, estudio todo, lo planifico bien, salvo, ese pequeño detalle. Que Joaquín, pasara por allí, solo para contemplarla.
Iban a secuestrar la, para pedir, una gran cantidad de dinero. Raudo Oscar, intercepto el coche de Estela, y bajaron los tres y la metieron al auto. Joaquín no daba crédito a lo que veía, no hablaba nada, temblaba. Ya la cagamos pensaba en si, Mientras que ella, sin poder safar de ellos. no podía gritar, Chucho la amenazo con una navaja, muy filuda, para que no gritase, indico a Joaquín, a taparle la boca, con una cinta. Joaquín, tembloroso hizo caso. Los ojos llorosos de Estela, miraban como con las manos temblorosas, no podía pegarle esa cinta.
El Cholo sabia, que podía embarrar a su gran amigo. Le pidió a Oscar parar. Y dirigiéndose a Joaquín, le pidio bajar. Él no acepto. No quería irse. Lo obligo, pero todo tembloroso, siguió negandose. mientras Chucho, le pidió a Oscar seguir.
-Dejalo, ya huevon., no ves que no quiere bajar, la vas a cagar
-¡No jodas huevon!, él no puede mancharse, bajate huevon (dirijiendose otra vez a Joaquín)
-¡Ya cállate!, llegando hablamos, tápale la cara a la flaca.
El Cholo un poco acalorado, le puso una bolsa de tela, en la cabeza. Se fueron en silencio, hasta el lugar del destino. La metieron a una vieja casona abandonada. No había casas cercanas, era muy alejado de Lima. Bajaron los tres y se llevaron a estela, Mientras, Joaquín, se quedo inmóvil. chucho le ordeno bajar. No tuvo más opción de hacerlo. Ya adentro a acordaron llamar para pedir el dinero. Oscar con una grabadora, hizo que ella hablara con sus padres, y que les mande el dinero. Con un celular nuevo, Oscar y Chucho, marcharon de alli a unos diez kilómetros, por temor a que lo rastreen. Quedaron los tres, Joaquín, miraba con asombro a Estela. El cholo tenia miedo embarrar a su amigo
-¿Por que carajo, no te bajaste, cuando te lo pedí.
-No le hagan daño, por favor.
-Yo que chucha se, es cuestión de ese huevon del cojo(chucho)
-Si, pero no le hagan nada, por favor .
-¿Que mierda te pasa?, ¿la conoces?.
-........
-Habla pe' huevon, responde.
-Si, ella es la chica que te conte, Cholo.
-¡Puta madre no jodas! no la cages pe'.
A Joaquín le aterraba la idea de que abusaran de ella, o quizás matarla. El Cholo le prometió que eso no iba a pasar. Solo le pidio que se vaya. Pero él seguía negándose. Al volver, Chucho y Oscar, tenian un poco de desconfianza. Ya que los padres no querían soltar esa cantidad de dinero que ellos le habían pedido. 2 millones de nuevos soles. Así que decidió, arriesgar, e hizo que ella los llamase, le quitaron otra vez la bolsa de tela, y la cinta de la boca. Allí Chucho le marco y ella toda aterrada y solloza, le pidió a sus padres rescatarla. Chucho se había vuelto muy avezado. y los amenazo con matarla. Esto puso en sobre salto a Joaquín quien aterrado al oir eso, salio a la calle. Detrás de él, salio el Cholo
-No te preocupes, huevon, solo lo dice para que le paguen rapido, ya te dije que no haríamos, eso
-Gracias cholo, eres muy bueno
-¡Ya entra, huevon!
Estela sabia muy bien que sus padres pasaban apuros económicos, como harían. Pensó en lo peor.
Al día siguiente, Aquel acto, ya era una noticia. Pero no sabían como dar con ellos. Soledad, no sabia donde andaba su hijo, pensó que estaría en casa de algún compañero. Y no se preocupo más. Era como las tres de la tarde, y la policía estaba con la familia de Estela, dieron con su auto moderno casi cerca de allí. Pero no tenían mas pistas. Chucho y Oscar, se fueron por comida y agua, esperando que la llamada de los padres de
Estela. Ya ahí, es donde el Cholo se queda dormido. Joaquín con unas ojeras. no había dormido nada. Le saco la bolsa de tela a su largirucha, como él la llama. Le quito la cinta, él se quito aquel pasamontañas. y mirándola fijamente
-No te preocupes, todo va a salir bien, yo soy Joaquín.
-Si, te conozco, te veo siempre por las mañanas- le dice ella toda temblorosa.
-Si, salgo a eso, por que me gusta verte, eres la chica más hermosa que he visto.
-¿Y por que me hacen esto?
-Te juro, que no lo sabia, ellos son buenos, pero se equivocaron, pero todo va a salir bien, no te preocupés, yo te cuidare.
-Me cuesta mucho creerte.
-Créeme, vas a estar con tu familia, te lo prometo, perdoname, perdona a mis amigos.
-Sabes, escuche cuando hablabas con ese que llamas Cholo, es verdad todo eso.
-Si, desde que te vi, me quede maravillado por tu belleza, salgo a verte siempre, antes de irme a estudiar, ya con verte soy feliz.
-Si, me había dado cuenta, pero no tienes miedo que ellos te hagan algo.
-No, ellos son buenos. Por eso no te preocupes, lo malo es que estamos lejos, y no se como se llama este lugar, con la ira que tenia no me fije por donde veníamos.
-Ahora te creo, eres muy bueno.
-Por eso te repito, no te van a hacer daño. ten confianza en mi.
Al llegar ellos, Joaquín volvió a poner la cinta a estela, pero ahora con cuidado, pero no la bolsa. se puso el pasamontaña. Chucho no le dijo nada. No habían recibido llamada alguna, cosa que los irritaba. El cholo repartio la comida, y Joaquín le pregunto si no había para estela. Chucho en tono sarcástico, le respondió que la comida aquella, era para pobres y ella era muy rica. Insistió tanto, que el Cholo le llevo comida, pero ella lo rechazo, en seguida fue Oscar, pero también le rechazo. Al final fue Joaquín quien le desato la manos, y le quito la cinta de la boca. Ella comió, poco. Joaquín al ver eso, le agradeció. Ya no le puso la cinta. Él que acariciaba sus manos, mientras la ataba suavemente, no aguanto y beso su mano derecha, agradeciéndole el gesto de haber aceptado comer. Ella lo miro tiernamente, confiaba en sus palabras.
Alli, fuera del salón, Chucho, preguntaba que tanto hacia dentro, pero Joaquin, no respondia.
-No te vayas a pasar, huevon, si te comes ese bombon, nos lo comemos los cuatro.
-No hables huevadas pe', chucho - respondio el cholo.
--Ta'mare que bien que quieres.
-Nada, huevon, una cosa es una cosa, sabes como son las cosas.
-Si lo se, pero si hay que aprovecha se aprovecha.
-¡Ya callate huevon!
Mientras descansaban, llamaron al celular de Chucho, eran los padres de Estela, querían comprobar que no lo habían hecho daño. Le prometió enviarle un vídeo, pero con la condición que suelte de una vez el dinero. Ninguno de ellos quería grabarla. Joaquin cogió el celular, al ver que Estela no quería hablar, se saco el pasamontañas. Eso lo hizo para que tenga confianza
-¿Que haces huevon?, te van a reconocer- grito Oscar
-¿Que mierda pasa?- grito Chucho entrando a aquella habitacion
-¡Ese huevon, se ha quitado el pasamontañas!
-¿Que te pasa huevon?, nos quieres cagar- increpo a Joaquin.
-¡Amarralo a ese huevon!-ordeno chucho a oscar, y llamo al cholo quien estaba meando en la calle.
El Cholo desobedeció a Chucho, en ese instante empiezan a discutir. Joaquin le pidió mesura, le pidió a Estela que hablara con sus padres mientras la grababa. Al acabar entrego el celular a Oscar, quien no sabia como enviar eso, y llamo a Chucho, para que se encargase. El Cholo y Joaquín, a un lado conversaban. Eran ya las 12 de la noche y Soledad empezó a preocuparse por su hijo, llamo todos los que conocía. Incluso fue a la casa del Cholo, pero cuando le dijeron que no estaba. Ya se imaginaba que estaba con ellos. Le daba miedo ir a la policía, tal vez le paso algo. A lo mejor se enteraria de algo terrible. Llego a casa y le puso una vela a San Martín de Porres.
Al ver el vídeo, una y otra vez. Joaquín pensó que tal vez los reconozcan por la voces, y se los dijo. Ellos le dieron la razón, era mejor borrarlo y hacer otro. Chucho ya no confiaba en el Cholo. Era muy amigo de Joaquín, así que se lo llevo a comprar y dejo a Oscar con ellos. Pero Oscar estaba muy cansado, y se quedo muy dormido a pesar de la advertencia de Chucho.
Para esas horas la policía, gracias a la dos llamadas que hizo desde aquella casa vieja, logro ubicarla. Y decidió ir en su búsqueda. La familia no queria soltar dinero alguno. Cuando Joaquín vio que Oscar se habia quedado profundámente dormido. Entro y empezó a conversar con Estela, ella le agradeció todo lo que hacia
-Sabes, no aguanto más aquí, te propongo escapar de aqui, no se realmente, pero te prometo que estarás en casa muy pronto, ¿que dices?
-Si, salgamos de aquí, ya no aguanto (casi llorosa lo abrazo)
Joaquín desato sus manos, le dio la casaca que tenia puesta. se cercioro que Oscar seguía durmiendo. Con mucho silencio salieron. Abrió la puerta, al no ver autos, empezaron a caminar si levantar sospechas. Eran las 3 de la mañana, del lunes. Soledad frente al altar de San Martín de Porres, pedía por su hijo. Su padre estaba de guardia en el hospital. no sabia nada. La policía iba a aquel lugar. Cuando habían caminado mucho, Joaquín se dio cuenta que llego a un lugar que conocía entraron a un servicio donde se lavaron la cara y las manos. Allí en ese lugar, ella volvió a agradecerle todo, y le dio un beso. Joaquín no lo podía creer. Su larguirucha lo había besado, aquella chica por la cual bajaba mas temprano de lo normal, para ir a estudiar. Ella tenia novio, pero Joaquín quien no sabia eso, le había hecho ver las cosas de otra manera. Se volvieron a besar. Pidió un taxi, y se fueron a casa.
Al llegar Chucho y el Cholo, encontraron a Oscar asustado. Ellos se habían ido. Y no se dio por enterado.
-¡Puta madre!-grito Chucho.
-¡Hay que arrancar, ese huevon nos va a cagar!
-No creo, no puede-dijo el Cholo
-Recoje todo, no dejes nada, -le pidió Chucho a Oscar.
Ya en el auto, el Cholo le pidió a Chucho, destruir aquel celular, este le hizo caso, lo puso debajo de una de las ruedas. Y enrumbaron hacia al sur. Hasta que se calmen las cosas.
Al llegar a casa, Joaquín pago el taxi, y este se marcho. (el taxista pensó que venían de una gran fiesta) le pidio a Estela, no contar que fueron sus amigos. Ella se lo prometió. Decidió contar otra cosa, y decir que pudo escapar. Le volvió a agradecer todo, y se despidieron con un beso, Prometiéndole volver a verse, pero en otra situación. Joaquín llego a su casa, y su madre, lo recibió con una gran reprimenda. Le dijo que había estado con unos compañeros de clase. Ella le creo, y agradeció a San Martín de Porres. Los padres de Estela retiraron la denuncia la policía no encontró a nadie, en esa casa, ni siquiera algún rastro. No se investigo más.
Al pasar unos días, Estela quien acabo con aquel chico presumido compañero suyo de estudios, les presento a sus padres a Joaquín. Ellos quedaron conformes y contentos con el nuevo enamorado de su hija. Él supo ganárselos con su sencillez y nobleza.
El Cholo llamo un día a Joaquín
-¿Como van las cosas? cumpa.
-Vente cholo, no paso nada, no te preocupes.
-Eres bien osado, pero todo esta bien.
-Si cholito, vente, tambien dile a esos huevon que no pasa nada.
-Esos están por Cuzco, chambeando, ya les dire. cuando me llamen.
.Si, entonces cuando esta por aquí, para jugar un partidito.
-Ahora mismo voy para allá, por cierto ¿que fue de tu larguirucha?
-¡Somos enamorados!
-No fastidies ¿anda franco?
-Si huevon, ella sabe que eres chevere, no te preocupes, ella esta bien.
-Entonces voy por allá, por que también extraño a mi hembrita
Ha pasado mucho tiempo, a Joaquín y Estela, les va muy bien, viven muy enamorados. acabar sus carreras, planean casarse. De aquella situación nunca mas se hablo.
Al llegar Chucho y el Cholo, encontraron a Oscar asustado. Ellos se habían ido. Y no se dio por enterado.
-¡Puta madre!-grito Chucho.
-¡Hay que arrancar, ese huevon nos va a cagar!
-No creo, no puede-dijo el Cholo
-Recoje todo, no dejes nada, -le pidió Chucho a Oscar.
Ya en el auto, el Cholo le pidió a Chucho, destruir aquel celular, este le hizo caso, lo puso debajo de una de las ruedas. Y enrumbaron hacia al sur. Hasta que se calmen las cosas.
Al llegar a casa, Joaquín pago el taxi, y este se marcho. (el taxista pensó que venían de una gran fiesta) le pidio a Estela, no contar que fueron sus amigos. Ella se lo prometió. Decidió contar otra cosa, y decir que pudo escapar. Le volvió a agradecer todo, y se despidieron con un beso, Prometiéndole volver a verse, pero en otra situación. Joaquín llego a su casa, y su madre, lo recibió con una gran reprimenda. Le dijo que había estado con unos compañeros de clase. Ella le creo, y agradeció a San Martín de Porres. Los padres de Estela retiraron la denuncia la policía no encontró a nadie, en esa casa, ni siquiera algún rastro. No se investigo más.
Al pasar unos días, Estela quien acabo con aquel chico presumido compañero suyo de estudios, les presento a sus padres a Joaquín. Ellos quedaron conformes y contentos con el nuevo enamorado de su hija. Él supo ganárselos con su sencillez y nobleza.
El Cholo llamo un día a Joaquín
-¿Como van las cosas? cumpa.
-Vente cholo, no paso nada, no te preocupes.
-Eres bien osado, pero todo esta bien.
-Si cholito, vente, tambien dile a esos huevon que no pasa nada.
-Esos están por Cuzco, chambeando, ya les dire. cuando me llamen.
.Si, entonces cuando esta por aquí, para jugar un partidito.
-Ahora mismo voy para allá, por cierto ¿que fue de tu larguirucha?
-¡Somos enamorados!
-No fastidies ¿anda franco?
-Si huevon, ella sabe que eres chevere, no te preocupes, ella esta bien.
-Entonces voy por allá, por que también extraño a mi hembrita
Ha pasado mucho tiempo, a Joaquín y Estela, les va muy bien, viven muy enamorados. acabar sus carreras, planean casarse. De aquella situación nunca mas se hablo.